Las células madre muestran, promesa y
peligro, en las enfermedades oculares
Un informe advierte de 3 mujeres que quedaron ciegas por un
tratamiento de degeneración macular en un "ensayo", y otro relata un
éxito.
Las células madre
podrían ofrecer una nueva esperanza para que las personas que están perdiendo
la vista por la degeneración macular relacionada con el envejecimiento, pero
esa promesa puede conllevar algún peligro, muestra una nueva investigación.
En un informe, tres
mujeres mayores quedaron permanentemente ciegas en una clínica del ojo de
Florida que realizó tratamientos con células madre no probados para sus ojos en
2015, dijo el autor principal del estudio, el Dr. Jeffrey Goldberg, catedrático
de oftalmología del Instituto del Ojo Byers de la Universidad de Stanford, en
Palo Alto, California.
Las mujeres creían
que la terapia de células madre era parte de un ensayo clínico, pero no hay
evidencias de que se estuviera realizando un ensayo clínico genuino, indicó
Goldberg.
"Parece que
persuadieron a las pacientes con la promesa de un protocolo de investigación y
no está claro si realmente estaban inscritas en alguna investigación",
dijo Goldberg. "Simplemente les inyectaron estas células de algún
tipo".
Cada una de las
mujeres, de 72 de 88 años, pagó 5,000 dólares por el procedimiento, lo que
debería haber sido una señal de alarma, dijo Goldberg. Los ensayos clínicos
normalmente no cobran a los pacientes.
El estudio aparece
publicado en la edición del 16 de marzo del New England Journal of Medicine.
Pero las células
madre sí son una promesa real para el tratamiento de la degeneración macular,
una causa importante de pérdida de la vista entre las personas de a partir de
50 años, dijo Goldberg.
Un segundo artículo
publicado en la misma revista informó de un esfuerzo legítimo por restaurar la
vista de una mujer japonesa de 77 años con degeneración macular mediante el uso
de células madre.
La degeneración
macular se produce cuando la edad o la enfermedad causa daños en la mácula, un
pequeño punto en el centro de la retina, según el Instituto Nacional del Ojo de
EE. UU. Esta parte del ojo es crucial para una visión central aguda, para ver
los objetos que están justo delante.
"Las células que
son responsables de la vista degeneran, y no son reemplazadas como parte del
proceso natural de curación en los seres humanos, ni tampoco en otros
mamíferos, por cierto", señaló Goldberg. "La esperanza con las
células madre es que reemplacen a las células que han degenerado y que
restauren la visión en estas enfermedades debilitantes y demasiado
habituales".
En el estudio piloto
japonés, los médicos injertaron una nueva capa de tejido retiniano producida
con células madre en el ojo derecho de la paciente.
Un año después de la
operación, la vista de la paciente se estabilizó y su ojo pareció haber
aceptado el injerto sin efectos secundarios graves, informaron los
investigadores.
Los resultados como
estos muestran que la terapia con células madre "sin duda merece la pena
investigarse usando los canales correctos", dijo el Dr. Ronald Gentile,
director del Servicio de Traumatología Ocular y director cirujano de la Clínica
de la Vista y del Oído de Mount Sinai de Nueva York.
Desafortunadamente,
parece que algunas clínicas oculares están intentando ganar algo de dinero con
la desesperación de las personas que están perdiendo la vista por la
degeneración macular, dijeron Goldberg y Gentile.
Las tres mujeres
tratadas en Florida recibieron inyecciones en ambos ojos de una mezcla de
plasma sanguíneo que contenía células madre procedentes de su grasa abdominal.
Todo el proceso de retirar la grasa de sus cuerpos, refinarla en células madre,
y luego inyectar esas células madre en sus ojos se hizo en menos de una hora,
dijeron los investigadores.
En una semana, las
pacientes experimentaron una serie de complicaciones que incluyeron la pérdida
de la vista, desprendimiento de las retinas y sangrado. Ahora todas están
ciegas, y es extremadamente improbable que recuperen la vista, dijo Goldberg.
El tratamiento con
células madre en Florida se presentó como un ensayo clínico en una base de
datos de registros y resultados administrada por la Biblioteca Nacional de
Medicina de EE. UU., comentaron los investigadores.
Aunque todavía
aparece en el sitio web del gobierno, en el listado se dice ahora: "Este
estudio se ha cancelado antes de la inscripción".
Además de cobrar una
cuota para el tratamiento, hubo varias otras señales de alarma en los casos de
Florida que los consumidores deberían tener en cuenta cuando piensen en
participar en un ensayo clínico, dijo Goldberg.
Las pacientes no
deberían haber recibido el tratamiento de los dos ojos a la vez. La mayoría de
los médicos solamente tratan un ojo para ver qué tal responde a un tratamiento
experimental antes de intentarlo en el otro ojo. Incluso las cirugías probadas
en el tiempo, como la extracción de cataratas, se realizan en un ojo a la vez,
dijo Goldberg.
Otros aspectos
preocupantes fueron: El formulario de consentimiento y otros materiales
escritos dados a las pacientes no mencionaba que se tratara de un ensayo real,
dijeron los autores.
Además, el
tratamiento carecía de casi todos los componentes de un ensayo clínico
adecuadamente diseñado, dijo Goldberg: no tenía una hipótesis basada en
experimentos previos de laboratorio, no había un grupo de control y no había
planes aparentes de seguimiento.
Las personas deben
mantener un escepticismo firme con respecto a la promesa inmediata de las
terapias con células madre.
"Como consumidor
se le llevará a creer que esto es lo mejor desde que se inventó el pan".
"Se ha hecho mucha publicidad a las células madre como cura para el envejecimiento
y las enfermedades. Los consumidores que sufren de ciertas enfermedades están
desesperados y toman medidas desesperadas".
En este momento,
indicó Goldberg, no hay ningún tratamiento con células madres que haya sido
aprobado por la FDA para la degeneración macular relacionada con la edad.
Las personas que
estén pensando en un tratamiento experimental con células madre deberían
obtener una segunda opinión de un médico en que confíen, particularmente si es
parte de un supuesto ensayo clínico que no está asociado con ninguna
universidad o centro médico académico, aconsejó Goldberg.
Estamos de acuerdo.
Hay que estudiar más, sopesar toda complicación, y omitir las injerencias de
los laboratorios.
OFTALMÓLOGO ESTEPONA
Comentarios
Publicar un comentario