El glaucoma es actualmente
la segunda causa de ceguera en todo el mundo. El objetivo del tratamiento del
glaucoma es detener o retrasar la progresión de la enfermedad. Los medicamentos
actuales para el glaucoma logran esto casi exclusivamente a través de la
reducción de la presión intraocular (PIO).
Desafortunadamente,
incluso con el uso adecuado de los medicamentos actualmente disponibles, muchas
personas con glaucoma aún experimentarán pérdida de visión. La presión
intraocular es el único factor de riesgo modificable conocido para los
pacientes con glaucoma, por lo que las mejoras en los resultados de los
pacientes se basan en un estricto control de la PIO y en la adhesión del
paciente a la terapia.
En esta actividad
educativa, los principales médicos revisan los agentes terapéuticos
establecidos y nuevos para pacientes con glaucoma, incluida la evidencia
clínica reciente de su seguridad y eficacia. Además, la discusión comprenderá
la evidencia reciente sobre los efectos de la baja presión de perfusión sobre
el desarrollo y la progresión del glaucoma.
En los últimos años, el
uso de algunos “complementos” ayuda a estabilizar el avance neurodegenerativo
del nervio óptico.
OFTALMÓLOGO ESTEPONA
Comentarios
Publicar un comentario